Unos de mis más grandes recuerdos de infancia eran el emprender aventuras familiares abordo de nuestro auto y explorar las riquezas culturales de mi país, México, eran paseos sorprendentes en los cuales pudimos conocernos más como familia y disfrutar de la naturaleza a flor de piel. Así que dentro de mis paseos familiares no podía faltar el planear un viaje por carretera, el cual esta vez decidimos realizar para celebrar las fiestas de fin de año.
Emocionados de explorar nuevos caminos y dispuestos a gozar en grande nos equipamos con todo lo necesario y dimos rienda suelta a nuestra celebración abordo de una Toyota Sienna, un vehículo que tiene todo lo que una familia necesita para vivir unas vacaciones muy especiales y lo más importante poder compartir con los abuelos esta sensacional experiencia por las carreteras de California, Nevada, Arizona y Utah.
En un viaje como este se requiere estar super cómodos, tener espacios para guardar todo lo que la familia necesita y tal es el caso de este vehículo, el cual cuenta con una amplia cajuela para el equipaje, detalles prácticos para tener a la mano los lentes, bolso, líquidos, tener conexiones suficientes para nuestros dispositivos electrónicos y que me dicen de las pantallas protectoras del sol, asientos reclinables, sistema de navegación, audio y sistema de cámara de reversa, para asegurarnos de que nada obstruye nuestro camino.
Cada camino recorrido estuvo lleno de grandes experiencias mi hijo estaba feliz de poder compartir esta aventura en familia, se sentía como pez en el agua, mientras explicaba a sus abuelos las cosas que veía a su paso y la manera en que fuimos cambiando de climas y disfrutando de los encantos de cada ciudad que conocimos, como fue en primer lugar la zona montañosa de Big Bear, en donde nos adentramos para ver y tocar la nieve. Después ver de cerca el mar en la bahía de San Diego, continuar con la travesía, pero esta vez en el desierto de Las Vegas y avanzar un poco mas por los arenales de Arizona y concluir el recorrido en la tranquilidad de los parques nacionales de Utah.
La Toyota Sienna está diseñada para 8 pasajeros, y lo mejor de todo que cada uno puede controlar su estancia en ella, ajustando el aire acondicionado, sonido y estar conectado con sus dispositivos electrónicos. Por cierto su sistema de puertas corredizas laterales, se pueden controlar desde enfrente o si lo prefiren los pasajeros pueden abrir y cerrar con facilidad.
Otros detalles que no puedo deja pasar es el hecho de que pude accesar a mi teléfono por medio del Bluetooth y usar la tecnología de radar, por medio del Monitor de Punto Ciego (BSM) con el cual puedo fijar bien los objetivo en el camino.Y si hablamos de gasolina, les cuento que con su mpg estimado por la EPA de 25 en carretera que ayuda a consumir un poco menos de combustible.
Sin duda una grata experiencia y un viaje lleno de gratos recuerdos, les cuento que ya estamos planeando nuestra siguiente aventura y será un gusto el compartirla con nosotros. Mientras tanto, les comento que si están pensando en un auto familiar para vivir estas y otra nuevas, piensen en esta Minivan, Toyota Sienna, tiene todo lo que una familia requiere.