Seguramente han escuchado por ahí que hasta “al mejor cazador se le va la liebre” y muchas veces estando en la cocina hasta al cocinero más experto se le puede arruinar sus platillos o comida del día No se a ustedes, pero a mi ya me ha pasado, así que buscando reparar estos “errorcitos” me di a la tarea en recopilar algunos Consejos para rescatar sus platillos o comida favorita. Y a continuación se los comparto.
Panes duros
Guardar las piezas de pan en bolsas herméticas de plástico y dar un golpe suave. Si está muy duro, el pan se puede aprovechar para rallarlo y utilizarlo como empanizador.
Excesos de grasa
Las salsa y caldos deben enfriarse para cuajar el exceso de grasa en la superficie. Una vez fría, la grasa puede retirarse fácilmente con una cuchara. En sopas y guisados, se les puede agregar una pieza de pan que absorbe la grasa como si fuera una esponja.
Vegetales sobrecocidos
Se recomienda pasar inmediatamente los vegetales a baño frío e agua con hielos para detener la cocción y fijar su color. Los vegetales cocidos en exceso se pueden utilizar como purés, bases para sopas o rellenos.
Exceso de sal
Sopas, cremas y salsas pueden disolverse del exceso de sal añadiendo mas agua, caldo o líquido de cocción o también puede agregarse trozos de papa para aborber el exceso de sal. Una vez que se ha quitado el sabor , se deben retirar las papas cocidas.
Guisos quemados
En este el ejemplo más común es cuando se nos quema el arroz, y para ello se recomienda vaciar la parte que no está quemada en un recipiente por separado y añadir cebolla o especies aromáticas como mejorana o perejil, para disimular el sabor a quemado.
Esperando que les hayan servido esto “consejitos”, los invito a que me compartan algunos de sus secretos y tenerlos a la mano en nuestra cocina.